El primero de abril, el Presidente Gabriel Boric promulgó la ley que establece la profesionalización del fútbol femenino en Chile. La nueva ley exigirá gradualmente la celebración de un contrato entre las sociedades deportivas profesionales y las jugadoras que sean parte del Campeonato Nacional Femenino de Fútbol. Si bien es un gran avance, quedan varios factores a considerar para una real profesionalización. Puroperiodismo analizó la ley, conversó al respecto con la directora de la asociación que agrupa a las futbolistas profesionales y presenta en este artículo los datos detrás de la precarización del fútbol femenino, los que dan cuenta de un problema que va mucho más allá de los contratos.
Por Bryan Gálvez y Álvaro Cordero
El Presidente Gabriel Boric salió a la cancha del Estadio Municipal de La Cisterna y a pesar de estar con traje y zapatos –sin corbata, como suele hacerlo–, cogió un balón de fútbol y lo dominó. O al menos lo intentó. Mientras las cámaras de la prensa se enfocaban en él, tras unos pocos toques, la pelota se le escapó. Aun así, lo aplaudieron. En todo caso, ese día, el primero de abril de 2022, el verdadero protagonista no era él, sino las cerca de mil mujeres que juegan fútbol de manera profesional en Chile y que, hasta esa jornada, no contaban con una ley que obligara a los clubes a contratarlas ni a formalizar su relación laboral.
De hecho, a eso había ido el Mandatario: a promulgar, junto a la ministra del Deporte y ex capitana de la Selección Nacional de Fútbol Femenino, Alexandra Benado, la ley que establece la profesionalización del fútbol femenino en Chile (ver texto de la ley).
Decenas de mujeres futbolistas los acompañaban.
El proyecto llevaba ya tres años tramitándose en el Congreso cuando, el 21 de marzo, la Cámara de Diputadas y Diputados lo aprobó de forma unánime, incluyendo así explícitamente a las mujeres futbolistas en las normas del Código del Trabajo que regulan la actividad laboral de los deportistas profesionales y en la Ley de Sociedades Anónimas Deportivas (SADP). De esta forma, tal como dice el nombre de la ley, “las SADP que sean parte del Campeonato Femenino Nacional de Fútbol, se encontrarán obligadas a contraer un contrato de trabajo con aquellas deportistas que sean parte de su plantel”.
Sin lugar a dudas, la aprobación de esta indicación trae consigo una luz de esperanza para las futbolistas que han desarrollado por años esta profesión a puro empuje y coraje. Un paso que, para Benado, significa un orgullo y honra, pues “con este proyecto estamos saldando una deuda histórica con las mujeres de este país”, aseguró.
Pero más allá de la promulgación y la exigencia de contratación por parte de los clubes, ¿qué significa realmente la aprobación de esta nueva ley? ¿Basta con ella para decir que el fútbol femenino en Chile es completamente profesional? Para dar respuesta a esas preguntas, Puroperiodismo presenta a continuación una revisión detallada del nuevo marco legal, así como la opinión de la directora de la Asociación Nacional de Jugadoras de Fútbol Femenino (ANJUFF), y los datos que han levantado respecto a su precaria situación laboral previo a la existencia de esta ley.
¿Qué dice la ley?
De acuerdo con lo estipulado legalmente, esta aprobación no entrará en vigencia sino hasta seis meses después de su promulgación. Por ende, a principios de octubre debiese comenzar a regir este primer paso hacia la profesionalización del fútbol femenino en nuestro país.
Pero, ¿qué clubes deben contratar jugadoras? La nueva ley aprobada indica que todos aquellos clubes “que participen de competiciones oficiales de carácter nacional en categoría adulta, en el plazo de tres años a contar de la fecha de entrada en vigencia de la presente ley”. Es decir, los 15 equipos que actualmente participan de la Primera División (ver tabla) y los que compiten el Ascenso femenino. Para ayudar aún más a su eficaz implementación, en el segundo artículo de esta nueva ley se especifica que los clubes podrán, antes de cumplidos cinco años de la entrada en vigencia de la ley, postular al Fondo Nacional para el Fomento del Deporte y de las Donaciones con Fines Deportivos. Esto, con el objetivo de fomentar el desarrollo de sus ramas femeninas.
Para ser más claros, las etapas de su implementación quedarían de la siguiente forma:
Primera etapa: En esta primera instancia, los clubes profesionales que formen parte del campeonato profesional de Chile deberán, en un plazo no mayor a un año, tener contratadas al menos al 50% de las jugadoras que componen su primer equipo.
Segunda etapa: En su segundo año de vigente la ley, los clubes deberán haber contratado al 75% de su plantilla.
Tercera etapa: Finalmente, en su tercer año -y límite de tiempo para su completa implementación-, los clubes deberán contar con el 100% de sus futbolistas contratadas.
Ver proyecto aprobado para promulgación:
Información publicada en: http://www.puroperiodismo.cl/los-primeros-pasos-para-una-profesionalizacion-del-futbol-femenino/